El partido de Paredes: polémicas con Atlético Tucumán, eje del equipo y fastidio por la eliminación de Boca

Boca perdió ante Atlético Tucumán por los 16avos de final y quedó eliminado de la Copa Argentina. El encuentro que se disputó en Santiago del Estero tuvo la presencia estelar de Leandro Paredes, que fue titular pro primera vez luego de haber sumado sus primeros minutos en el Torneo Clausura en su vuelta al Xeneize.
A los cinco minutos de juego, todo el conjunto tucumano pidió la expulsión del exjugador de la Roma, ya que llegó tarde a disputar la pelota y pisó a Mateo Coronel, quien no pudo disputar el segundo tiempo a raíz de esa infracción.
Un rato más tarde, el propio Coronel fue a buscar a Paredes como una especie de revancha: le pegó en el tobillo al campeón del mundo, que se quejó porque su rival no fue sancionado con ninguna tarjeta.
Más allá de los roces con el jugador de Atlético, el volante se adueñó del mediocampo de Boca y, por varios pasajes, fue quien controló el ritmo del encuentro. Sobre el cierre de la primera parte, sumó una nueva polémica: tras un cabezazo, la pelota pegó en su brazo, pero el árbitro no sancionó penal.
En el segundo tiempo, el mediocampista de 31 años siguió manejando todas las transiciones de Boca. Hasta que llegó el gol del Decano, donde también fue protagonista: sintió un agarrón, cayó al césped y pidió falta, pero mientras protestaba, Clever Ferreira aprovechó y abrió el marcador a los 20 minutos.
Instantes después, Paredes volvió a pisar a un rival y esta vez sí fue amonestado por el árbitro.
Además, participó en las jugadas más peligrosas de Boca en la segunda mitad: habilitó a Brian Aguirre, quien asistió a Edinson Cavani, aunque el uruguayo definió mal, y también tuvo un remate frontal que el arquero Matías Mansilla logró contener con una gran atajada.
Una vez terminado el encuentro, recibió el saludo de otros jugadores y un futbolista de Atlético Tucumán le pidió intercambiar la camiseta. Sin embargo, Paredes no ocultó su fastidio por la eliminación.