Derrumbe, heridos y destrozos tras el temporal en Delfín Gallo

“Fue un tornado”, relató una vecina de Delfín Gallo al describir lo ocurrido entre las 18 y las 19 de ayer, cuando una tormenta con fuertes vientos y caída de granizo azotó la localidad. En pocos minutos, el temporal provocó destrozos en viviendas, caída de postes, explosiones que provocaron cortes de luz y un derrumbe que dejó heridos.
El hecho más grave se registró en el supermercado “Yan”, ubicado en la avenida Santiago Gallo al 700, donde una pared colapsó por la fuerza del viento. Hubo al menos cuatro personas heridas, además de voladuras de techos y cortes de luz en toda la comuna.
La fuerte tormenta provocó el derrumbe de una pared del supermercado Yan, lo que generó una situación de caos y tensión en la zona. Según informaron fuentes policiales, el colapso de la estructura derivó en intentos de saqueo. “Infantería está trabajando en el lugar conteniendo aproximadamente a unas 1.000 personas que quieren ingresar”, precisaron desde la fuerza. Se reportaron tres personas heridas, aunque ninguna reviste gravedad. En el lugar también trabajaron los Bomberos, quienes ingresaron al edificio para verificar si existían víctimas atrapadas entre los escombros.

El Ministerio de Salud informó que fueron cuatro las personas hospitalizadas con heridas de distinta gravedad que fueron evaluadas. “Participaron del operativo cinco ambulancias de máxima complejidad, dirigidos por el ministro Luis Medina Ruiz. Todos los pacientes internados están siendo evaluados y en observación”, precisó el comunicado de anoche.
“El primer objetivo fue salvar vidas”, explicó el comisario mayor René Ramírez, jefe de la Unidad Regional Este, quien confirmó que dentro del local se encontraban siete trabajadores. “Tres de ellos fueron trasladados con lesiones al hospital, mientras que los otros cuatro fueron atendidos en el CAPS de la zona y se encuentran fuera de peligro”, detalló.
Ramírez agregó que se desplegaron más de 100 efectivos y alrededor de 20 móviles policiales, además de las divisiones Infantería y Motorizada, con el apoyo de Bomberos Voluntarios y Defensa Civil. “Se desplegó personal de distintas zonas como Burruyacu, Leales y Tafí Viejo para colaborar con las tareas de rescate y asistencia. Lo prioritario fue salvar vidas y asegurar el área del derrumbe”, dijo.
El temporal afectó a casi toda la localidad. Hubo caída de postes, cables y explosiones de transformadores que dejaron sin luz a la comuna. Además, se registraron voladuras de techos y daños en varias viviendas. “Las fuertes ráfagas de viento derribaron tendidos eléctricos, lo que dejó sin luz a toda la comuna”, agregó el jefe policial.
Los afectados
El vecino Armando Chávez relató los momentos de angustia que vivió con su familia. “Con el viento se voló el techo de la habitación de mi hija, de la cocina y de la galería”, contó, mientras intentaba ordenar entre los restos de su vivienda. “Vivo con cinco nietos y mi hija, la que perdió la habitación. En ese momento yo no estaba en esa parte de la vivienda. Los chicos se encerraron en un dormitorio y, por suerte, ninguno salió herido”, relató con alivio.
Los daños materiales fueron severos. “Todo está empapado: la heladera, el microondas, los muebles de cocina. Todo se mojó”, explicó con resignación.
Una niña herida
Entre los heridos hubo una niña de siete años, Nahiara Giménez, que sufrió un golpe en la cabeza por la caída de un ladrillo y fue trasladada consciente al hospital del Niño Jesús. “Cuando fue el viento fuerte, se levantó todo el techo completo de la casa. Un ladrillo se desprendió y le pegó en la cabeza”, contó Ana Cisnero, abuela de la menor.
En la casa viven cuatro personas: la pareja y las dos hijas. “Se rompió la heladera, el televisor, todo. Otro ladrillo cayó sobre la tele y la partió. Fue un desastre. Desde las 18.30 ya no teníamos luz y se escuchaban ruidos fuertes, como explosiones”, relató. “Fue un tornado, porque el viento levantó muchos techos. Es la primera vez que vivimos algo así”, añadió la mujer.
“El viento fue muy intenso y duró alrededor de media hora”, contó Daniel Carrizo. “Cuando paró un poco, salimos con los vecinos y vimos los destrozos”, recordó. A su lado, María González coincidió: “Parecía un tornado. En cuestión de minutos pasó todo”./LaGaceta